Lucir una piel
perfecta, limpia, sin imperfecciones ni arrugas, empieza por un buen cuidado.
En cada etapa de tu
vida, tu piel necesita un cuidado diferente. Debes tener en cuenta que hasta
los 35 años, una persona renueva la epidermis (capa más externa de la piel)
cada 25 días aproximadamente. Luego este proceso se va ralentizando a razón de
10 días por cada diez años. Es decir, que una persona a los 50 años tendrá un
recambio epidérmico cada 45 a 50 días.
Cuidar tu piel
acorde a tu edad es muy importante, por lo que aquí te mostramos que debes
hacer en cada etapa:
Entre los 18 y 25 años, es la etapa más importante, ya
que es el momento de prevenir, y de sentar las bases para el cuidado de tu
piel. En esta etapa te recomendamos sobre todo que mantengas la piel limpia e
hidratada. Si tienes la piel seca, lo mejor es que apliques una crema
hidratante por la mañana y por la noche. Si por el contrario, tienes la piel
grasa, lo mejor es aplicar un gel limpiador y un tónico astringente.
Entre los 25 y 30 años, debemos seguir manteniendo la
piel limpia e hidratada. Es muy importante que esta limpieza e hidratación la
hagamos a diario, dos veces al día (mañana y noche). Debemos también usar cremas de protección
solar incluso en invierno, ya que el sol se ha convertido en el agente externo
más peligroso para el envejecimiento prematuro. Aunque aún es pronto para usar
cremas anti-edad, no está de más que incorporemos algún producto con
antioxidantes o un contorno de ojos a nuestra rutina diaria.
La etapa
comprendida entre los 30 y los 40 años,
es también de las más importantes en el proceso de cuidado de nuestra piel. Las
primeras arrugas empiezan a aparecer, se acentúan las líneas de expresión, etc.
por lo que no debemos descuidar ni un solo detalle del día a día de nuestra
limpieza. En esta etapa, debemos elegir cremas nutritivas, anti-edad e
incorporar un tratamiento exfoliante dos veces a la semana.
A partir de los 40 años, los síntomas de envejecimiento
de la piel comienzan a aparecer. En esta etapa, las cremas humectantes serán la
clave del cuidado de tu piel. Su alto contenido en colágeno, ceramidas y
elastina aportarán a tu piel la firmeza e hidratación que necesitas. También es
recomendable mantener las cremas nutritivas, anti-edad y con antioxidantes para
rejuvenecer la piel, sin olvidar que la protección solar será imprescindible en
nuestra día a día.
Y no olvides que beber
mucha agua, una dieta equilibrada, y consumir productos con alto contenido de
vitamina C, son factores que nos ayudarán siempre a mantener una piel sana y
cuidada.
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